El nuevo disco de la cantante Rhiannon Giddens se llama “Freedom Highway” y, tal como lo dice su nombre, es un camino hacia la libertad: la de Giddens, que muestra toda su madurez como compositora, y la de la comunidad negra en Estados Unidos, pues es un recuento de su historia llena de pecados, penas y amarguras pero a la vez llena de resiliencia. A través de nueva canciones originales, una canción tradicional y dos canciones de la época de la lucha negra por los derechos civiles, la exintegrante de Carolina Chocolate Drops hace un retrato de la experiencia negra en Estados Unidos con temas personales y políticos que mezclan cuestiones históricas que no han perdido vigencia, haciendo caer en la cuenta de que la protesta que se hacía a través de las canciones hace 200 años, todavía está vigente. “Freedom Highway” es un disco crudo y mucho más personal que el anterior, grabado en cabañas de madera construidas antes de la guerra civil estadounidense, que une el presente con un pasado que no ha cambiado pero que busca dar la energía vital para lograr una transformación.